La autoridad electoral de Venezuela incumplió medidas de “transparencia e integridad” en las presidenciales del 28 de julio, según un informe preliminar de un panel de expertos de las Naciones Unidas publicadoayer, a lo que el chavismo respondió con la amenaza de cerrar las puertas a cualquier observación internacional.
El chavismo, que subyuga a los cincos poderes del Estado vigentes en el país caribeño, habría espiado a los expertos de la ONU al asegurar que tuvieron “contactos directos, vía telefónica y a través de videoconferencias, con funcionarios del Departamento de Estado”, razón por la que “no hay ninguna duda (de) que sus declaraciones son producto de las instrucciones hostiles emanadas de esta instancia”, según publicó EFE.
“La opinión emitida en su irresponsable escrito no es más que un acto de propaganda que sirve a los intereses golpistas de la ultraderecha venezolana, con los cuales interactuaron constantemente antes, durante y después de las referidas elecciones”, manifestó el régimen venezolano.
El reporte del panel de expertos de la ONU destaca que el anuncio del resultado electoral, hecho a través de dos boletines el 29 de julio y 2 de agosto, respectivamente, “sin la publicación de sus detalles o la entrega de resultados tabulados a los candidatos, no tiene precedentes en las elecciones democráticas contemporáneas”.