"Informé al ministro de las novedades en materia de seguridad y de las amenazas de Irán y sus satélites contra Israel y la región", dijo Gallant en un mensaje en su cuenta de X.
El ministro se encuentra en plena ronda de contactos ante la inminencia de un ataque de la república islámica.
Ayer, Gallant habló con su homólogo de Estados Unidos, Lloyd Austin, para discutir la amenaza iraní y los esfuerzos para crear una coalición internacional que repela la agresión, como sucedió en abril con el anterior ataque de Irán.
El ministro israelí ha mantenido un estrecho contacto telefónico con Austin en los últimos días, y el lunes recibió en Israel al jefe del Comando Central de Estados Unidos (CENTCOM), el general Michael Kurilla, en plena escalada de la tensión.
Israel se prepara para un inminente ataque de Irán y sus aliados, que juraron vengar los reciente asesinatos del máximo líder militar del grupo chií libanés Hizbulá, Fuad Shukr, y del líder político del grupo islamista Hamás, Ismail Haniyeh.
El primer asesinato ocurrió el 30 de julio en un ataque reivindicado por Israel en las afueras de Beirut, y el segundo, que las autoridades iraníes atribuyen a Israel, ocho horas después, el 31 de julio, en Teherán.
Irán, enemigo acérrimo de Israel, mantiene una alianza informal con Hamás, que controla la Franja de Gaza, y la Yihad Islámica en Cisjordania ocupada, así como con Hizbulá en Líbano, los rebeldes hutíes de Yemen, la Resistencia Islámica en Irak y con otros grupos en Siria.
Con 350 drones y misiles, la república islámica lanzó un ataque directo e inédito contra territorio israelí a mediados de abril en represalia por un bombardeo contra el consulado iraní en Damasco, que causó la muerte de siete miembros de la Guardia Revolucionaria, entre ellos dos generales.
Ese ataque fue neutralizado por los sistemas de defensa de Israel y sus aliados occidentales y dejó daños menores. Sin embargo, esta vez no está claro qué forma tomará la respuesta iraní.