La delegación llegó al país sobre las 03:20 de la madrugada hora local (06.20 hora GMT) en un vuelo de Aerolíneas Argentinas procedente de Madrid.
Andrés Mangiarotti, encargado de negocios de la embajada en Caracas, encabezó el grupo que llegó esta madrugada a Ezeiza y que fue recibido por el vicecanciller argentino, Leopoldo Sahores.
En las próximas horas se espera la llegada de un segundo grupo con el resto del personal de la embajada, que quedó bajo custodia de Brasil desde el jueves.
Los diplomáticos argentinos en Venezuela fueron expulsados esta semana junto a los de Chile, Costa Rica, Perú, Panamá, República Dominicana y Uruguay por sus "injerencistas acciones y declaraciones" sobre los comicios celebrados el pasado 28 de julio que, según el Consejo Nacional Electoral (CNE), otorgaron la reelección Nicolás Maduro.
Tras su salida del país caribeño el jueves, la delegación argentina viajó primero a Lisboa -vía Madeira- y luego a Madrid, antes de partir ayer rumbo a Buenos Aires.
El Ejecutivo argentino no ha reconocido el triunfo de Maduro y sí al opositor Edmundo González como "legítimo ganador y Presidente electo", según un mensaje publicado ayer por la canciller, Diana Mondino, en su cuenta de la red social X.
Un comunicado posterior de la Cancillería afirmó que el país "sigue con extrema atención y preocupación los acontecimientos en Venezuela a fin de pronunciarse en forma definitiva".
La expulsión del personal de la embajada argentina en Caracas estuvo cargada de polémica debido a que seis opositores venezolanos se encuentran asilados allí desde marzo.
El Gobierno de Maduro se negó en múltiples ocasiones a otorgarles un salvoconducto para abandonar el país y las autoridades argentinas incluso denunciaron "hostigamiento" contra la sede diplomática durante los últimos días.
Ante esta situación, Brasil se hizo cargo de la embajada, de los trabajadores locales de la misión y de los seis asilados, y desde este viernes ya se puede ver su bandera en el edificio.
La relaciones entre Argentina y Venezuela -que fueron estrechas durante los mandatos de los peronistas Néstor Kirchner (2003-2007), Cristina Fernández (2007-2015) y Alberto Fernández (2019-2023)- han empeorado desde que en diciembre pasado llegó a la Casa Rosada Javier Milei, quien ha tenido serios desencuentros con Maduro.