"La Unión Europea desea expresar su profunda preocupación por el arresto y la detención, fuera del respeto de la ley, de Foniké Menguè y Mamadou Billo Bah. La UE reafirma su compromiso con el derecho a un juicio justo", escribió en la red social X Peter Stano, portavoz del jefe de la diplomacia comunitaria, Josep Borrell.
"La coordinación nacional del FNDC se ha enterado con consternación del secuestro de su coordinador nacional Oumar Sylla, alias 'Foniké Mengue', y de Mamadou Billo Bah, responsable de las sucursales y de movilización, la noche de este martes 9 de julio de 2024, por un grupo de militares encapuchados y algunos vestidos de civil fuertemente armados", señaló la plataforma opositora a través de la red social Facebook.
El FNDC denunció que Sylla y Bah fueron agredidos, maltratados, golpeados a puñetazos y patadas en la cara y luego arrastrados por el suelo hasta los vehículos de sus captores.
Sylla y Bah fueron puestos en libertad en mayo de 2023 tras la mediación de líderes religiosos después de haber sido detenidos desde julio de 2022 y enero de 2023, respectivamente.
Entonces, su liberación se produjo después de una jornada de fuertes protestas en la capital, Conakri, y otras ciudades del país en las que murieron siete personas y 32 resultaron heridas por disparos de la Policía, mientras 56 manifestantes fueron detenidos, según el comité organizador de esas movilizaciones.
El FNDC, que forma parte de las llamadas Fuerzas Vivas de Guinea, la alianza que convocó esas protestas y que lideró en 2019 las manifestaciones contra el tercer mandato del expresidente Alpha Condé, ha organizado desde la llegada de la junta militar al poder varias movilizaciones y ha sufrido la detención de varios de sus miembros, algunos de ellos aún en prisión.
Guinea-Conakri está dirigida por la junta militar que encabeza el coronel Mamadi Doumbouya desde el 5 de septiembre de 2021.