Con este pacto, la EUDA -con sede en la capital lusa y que fue inaugurada hoy de forma oficial- y el país sudamericano planean intercambiar experiencia y datos sobre nuevas sustancias psicoactivas y el mercado de cocaína, además de establecer un Sistema de Alerta Temprana sobre Drogas en Ecuador.
También se comprometen a intercambiar las mejores prácticas en respuestas sanitarias y sociales a los problemas de drogas, incluida la prevención, el tratamiento, la reducción de daños y la integración social.
El documento fue firmado por el director ejecutivo de la UEDA, Alexis Goosdeel, y por el embajador y jefe de la Misión de Ecuador ante la Unión Europea, Xavier Aliaga Sancho.
La comisaria europea de Interior, Ylva Johansson, que estuvo presente en la firma del acuerdo, explicó en rueda de prensa que este pacto refuerza el objetivo de impulsar las "relaciones translánticas" del bloque.
Según sus cifras, las organizaciones de narcotráfico abarcan más de cien nacionalidades, por lo que, defendió, "es necesario una red para combatir una red".
"Estamos haciendo mucho en este área y es absolutamente necesario porque no es posible para un solo país o la UE luchar contra esta red criminal solos, porque (estas redes) están en ambos lados del Atlántico y necesitamos intercambiar información y juntar investigaciones", alegó.
Aun así, aclaró que este acuerdo con Ecuador no es la primera colaboración con este país, ya que actualmente están realizando una monitorización del puerto de Guayaquil- un importante punto de salida de droga a Europa-, ni tampoco en la región.
"Se están preparando más acuerdos de trabajo (con otros países) y necesitamos más socios en este combate", alegó Johansson en la rueda de prensa, donde recalcó que el papel de América Latina en esta lucha es "crucial, crítica".
En esa línea, precisó que están en conversaciones o tienen acuerdos con países como Colombia, Perú, Bolivia, Brasil y México.
La Agencia de la Unión Europea sobre Drogas, que toma el relevo del antiguo Observatorio Europeo de las Drogas y las Toxicomanías (EMCDDA), abrió hoy sus puertas con el objetivo de afrontar los nuevos retos sanitarios y de seguridad que conlleva el mercado de sustancias ilegales en el continente, que es cada vez más "complejo".
En concreto, se centrará en prevenir posibles situaciones de riesgo en los diferentes Estados miembro, alertar en tiempo real a los países de nuevas tendencias y aportar conocimientos científicos a este combate.