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El destituido comandante de Bolivia, Juan José Zuñiga, acusado de un “intento de golpe de Estado” en contra del Gobierno del presidente, Luis Arce, fue capturado al salir de la sede del Estado Mayor de Bolivia. Este lideró a un grupo de militares que con tanques irrumpieron en la sede del Ejecutivo en la ciudad de La Paz.
Zúñiga, mientras estaba declarando ante la prensa, fue capturado y conducido a un vehículo policial en las afueras de un cuartel militar. “¡Está detenido mi general!”, señaló el viceministro de Gobierno (Interior), Jhonny Aguilera, según las imágenes compartidas en las redes sociales.
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El ex jefe militar afirmó en el momento en que era capturado que el presidente Luis Arce le ordenó sacar los “blindados” para “levantar” su popularidad.
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En la fecha, un tanque tiró la puerta de la Casa Grande del Pueblo, sede del Gobierno de Bolivia en la ciudad de La Paz. Zuñiga, junto a un grupo militar, ingresó por siete minutos y luego se retiró.
Zuñiga al salir de la sede del Ejecutivo, dijo a los medios que liberaría a “todos los presos políticos”, incluyendo a la expresidenta interina Jeanine Añez, al gobernador opositor Luis Fernando Camacho y a “todos los militares presos”.
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Posteriormente, el mandatario Arce encaró a Zuñiga en la puerta de la Casa Grande del Pueblo, sede del Gobierno, y le ordenó “replegar” a los militares que lo acompañaban. Luis Arce designó a José Wilson Sánchez como el nuevo comandante general del Ejército. Al asumir, Sánchez hizo un llamado a los militares golpistas a regresar a sus cuarteles.