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El presidente de la República de Paraguay, Santiago Peña, se solidarizó y pidió respetar la democracia y el Estado de derecho en Bolivia ante el ingreso irregular de unidades del Ejército boliviano a la sede del Gobierno del presidente, Luis Arce.
“El Paraguay condena las movilizaciones irregulares del Ejército de Bolivia denunciadas por el presidente Luis Alberto Arce. Hacemos un enérgico llamado a respetar la democracia y el Estado de derecho”, escribió el mandatario paraguayo.
Luis Arce, presidente de Bolivia, denunció movilizaciones irregulares de algunas unidades del Ejército Boliviano. Incluso el exmandatario Evo Morales advirtió que se está gestando un golpe de Estado en Bolivia y señaló como responsable al jefe del Ejército, Juan José Zúñiga, quien fue destituido por Arce por advertir que no permitiría un nuevo gobierno de Morales.
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“Denunciamos movilizaciones irregulares de algunas unidades del Ejército Boliviano. La democracia debe respetarse”, escribió Luis Arce en su cuenta de X.
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Militares forzaron sede del Gobierno con camión blindado
Según algunos medios, militares ocuparon el Palacio Quemado, sede del Gobierno boliviano, forzando las puertas con un camión blindado. Según videos que recorren en redes sociales, Luis Arce se plantó ante Zúñiga y ordenó el repliegue de los militares.
Además, convocó a sus seguidores a defender la democracia. “Necesitamos que el pueblo se movilice contra el golpe de Estado. No podemos permitir que retornen las intentonas golpistas”, dijo desde la Casa Grande del Pueblo.
Zúñiga, antes de ingresar a la sede del Gobierno, declaró a medios locales que la movilización de militares se da como expresión del descontento y molestia por la situación del país. Agregó que “por ahora” sigue obedeciendo al presidente Luis Arce, pero tomará medidas para cambiar el gabinete del Gobierno.
El conflicto se inició luego de cruces entre Evo Morales y Luis Arce, quienes si bien eran aliados e incluso Arce fue ministro de Economía en el mandato de Morales, el actual mandatario acusó al expresidente de intentar acortar su mandato con un golpe blando, es decir, un golpe de Estado político.