La ceremonia de la firma del acuerdo se produjo después de que ambos mandatarios mantuvieran un encuentro privado de cerca de dos horas.
Este cara a cara se produjo después de que ambas partes mantuvieran una cumbre en formato ampliado de unos 90 minutos en el residencia de huéspedes de Kumsusan en Pionyang, donde Putin se encuentra de visita por primera vez en 24 años.
El asesor de Putin en materia de política internacional, Yuri Ushakov, ya adelantó en la víspera que este nuevo tratado sustituirá a los firmados entre Moscú y Pionyang en 1961, 2000 y 2001.
El propio Ushakov indicó que el nuevo documento es necesario dados los profundos cambios en el panorama geopolítico global y la evolución de la relación bilateral, especialmente reforzada desde que Rusia invadió Ucrania a principios de 2022, una acción que desde el principio contó con el pleno apoyo de Corea del Norte, tal y como recordaron hoy Putin y Kim durante la cumbre ampliada.
El tratado tendrá en cuenta "todos los principios universales del derecho internacional, no tendrá ningún carácter de confrontación, no estará dirigido contra ningún país y estará encaminado a garantizar una mayor estabilidad en la región de Asia Nororiental", según dijo el martes el asesor presidencial.
En los últimos días, coincidiendo con la histórica visita de Putin, el Kremlin y la propaganda norcoreana han subrayado la necesidad de reforzar su alianza para contribuir al establecimiento de un orden multipolar que acabe con la hegemonía de EE.UU.
En ese sentido, Putin aseguró que ambos países trabajarán para la creación de un "sistema comercial y de pagos recíprocos" que permita los intercambios circunvalando los circuitos financieros ligados al dólar a los que ambos países tienen vetado el acceso, según escribió el propio mandatario ruso en un artículo publicado por el diario norcoreano Rodong el martes.
Muchos analistas creen que el viaje de Putin, que tiene previsto volar hoy a Vietnam para una visita de dos días, puede servir para profundizar además lazos militares tras el acuerdo en este terreno que él mismo y Kim rubricaron en una cumbre el año pasado en la región rusa de Amur.