“Las distintas delegaciones están negociando. Es prematuro hacer análisis ahora. Al final se verá en qué consiste el acuerdo”, avanzó en el canal de televisión Sky el también vicepresidente de Italia, país que este año acoge la presidencia de turno del G7.
Los jefes de Estado o de Gobierno del G7 -Alemania, Canadá, Estados Unidos, Francia, Italia, Japón y Reino Unido- se reúnen desde hoy y hasta el sábado en un lujoso hotel de la región italiana de Apulia (sur), aislado y blindado para la ocasión.
La cumbre ha arrancado con polémica, después de que una fuente de la Unión Europea avisara a algunos medios de que la presidencia italiana del G7, de la ultraderechista Giorgia Meloni, negociaba para quitar una referencia al acceso al aborto en el borrador.
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Fuentes italianas aseguraron sin embargo que "ningún país ha pedido eliminar la referencia a cuestiones relativas al aborto en el borrador de la cumbre del G7", subrayando que, en todo caso, "las negociaciones -del texto- siguen abiertas".
"Todo lo que se incluirá en el documento final será un punto de convergencia fruto de una negociación entre los miembros del G7", sostuvieron.
Los líderes el pasado año plasmaron en su declaración conjunta, en la ciudad japonesa de Hiroshima, reafirmaron su “compromiso” en defensa de los derechos de las mujeres y a proteger “el acceso al aborto seguro y legal”.