Según un comunicado castrense, el Ejército israelí allanó edificios y demolió bocas de túneles en Deir el Balah, centro de Gaza, donde aseguró haber abatido a "varios agentes de Hamás", incluidos miembros de su fuerza de élite, conocida como Nukhba.
Después de que las fuerzas israelíes abandonaran la parte oriental de Deir el Balah, los cuerpos de cinco civiles fueron recuperados de esta zona por los equipos de defensa, según reportan este lunes fuentes palestinas, que denuncian intensos bombardeos de artillería durante toda la noche.
Otros dos gazatíes murieron, y varios más fueron heridos, como resultado del bombardeo de un avión de guerra contra una casa en el barrio de Shujaiya, al este de la norteña ciudad de Gaza, informó hoy la agencia palestina Wafa.
Por su parte, el Ejército israelí aseguró también haber abatido con drones a dos hombres armados en Rafah, sur del enclave palestino, que se dirigían hacia la boca de un túnel.
Fuentes palestinas citadas por Al Jazeera denuncian también ataques de artillería en varias zonas al norte de Rafah, incluidas Khirbet al Adas y al Hashaashin, causando un número indeterminado de víctimas.
Estos ataques se producen dos días después de la mortífera operación de rescate israelí que tuvo lugar en el campamento central de Nuseirat, de donde todavía se espera recuperar más cadáveres a causa de los bombardeos, además de los alrededor de 270 hallados desde el sábado, según el Ministerio de Sanidad, entre ellos al menos 64 niños.
El hospital de Al Aqsa, próximo a esta área, ha hecho un llamamiento a la comunidad internacional para que intervenga y proporcione suministros médicos y combustible, ya que solo puede mantener encendido un generador y siguen desbordados con centenares de heridos.
Desde el 7 de octubre, y según cifras de ayer de Sanidad, más de 37.080 gazatíes han muerto, en su mayoría mujeres y niños, y unos 84.500 han sido heridos.