En este centro, se realizó una importante renovación curatorial y museográfica de la sala para albergar más de 200 piezas, gracias a una inversión de más de 327.000 dólares.
“Era muy necesario que el área museográfica tuviera una nueva visión y a la misma vez un nuevo atractivo”, explicó a EFE el director ejecutivo del Instituto de Cultura Puertorriqueña (ICP), Carlos Ruiz, quien indicó que el proyecto comenzó hace dos años.
El responsable del ICP destacó que la selección de las piezas es “muy precisa y muy valiosa para contar la historia indiana de Puerto Rico”.
Una extensa variedad de cemíes, vasijas y ornamentos componen la muestra, provenientes de la colección del ICP, el Museo y Centro de Estudios Humanísticos del Recinto de Gurabo de la Universidad Ana G. Méndez y de la Universidad de Puerto Rico en Utuado.
Entre los materiales, se incluye el dujo zoomorfo de mármol rosado, que se encontró en la zona del Lago Dos Bocas, próximo a Caguana.
Según el arqueólogo residente, Reiniel Rodríguez, quien realizó la labor curatorial de la exhibición, ese es “el dujo más famoso que existe en el Caribe".
También figura el trigonolito -explicó Rodríguez- “más emblemático de la arqueología de Puerto Rico”, también conocido como cemí de Santa Isabel.
“Estos son artefactos que están asociados con el mundo ritual, que es el tipo de actividad principal que se dio aquí en Caguana”, indicó.
La exposición comienza con los primeros pobladores de la isla, mostrando las llamadas manos cónicas, uno de los artefactos más elaborados que se utilizaron para procesar productos cultivados como la yuca, la batata y el maíz.
“Nosotros lo que queremos es actualizar información sobre los habitantes indígenas de Puerto Rico" y desmentir que no tenían agricultura ni cerámica, dijo el arqueólogo.
Del total de la inversión, más de 273.000 dólares fueron destinados para el diseño y fabricación de la museografía, a cargo del famoso artista puertorriqueño Garvin Sierra.
El Centro Ceremonial Indígena de Caguana es el yacimiento arqueológico más importante de Puerto Rico y uno de los más grandes del área antillana.
Cuenta con el mayor número de bateyes en el Caribe insular, un total de diez, que se distribuyen a través de siete hectáreas de terreno e incluyen monolitos de piedra y petroglifos.
El sitio arqueológico de Caguana estuvo habitado al menos por cerca de 300 años, desde el 1200 al 1500 de nuestra era, siendo abandonado después de la conquista española de la isla, aunque los expertos investigan para comprobar si sus orígenes son anteriores.