"Sudáfrica está comprometida con el Estado de derecho internacional, el respeto universal de los derechos humanos y la solución de todas las disputas internacionales mediante la negociación y no la guerra, y la autodeterminación de todos los pueblos, incluidos los palestinos", afirmó Ramaphosa en un comunicado emitido a última hora de este lunes.
El mandatario subrayó que "todos los participantes en el conflicto deben garantizar que los combates y las hostilidades lleguen a su fin de inmediato, que todos los rehenes sean liberados de inmediato y que Israel retire inmediatamente sus fuerzas militares de Gaza".
"Sólo así se podrán proteger los derechos de la población civil palestina y se podrán sentar las bases para una paz sostenible", agregó el presidente sudafricano.
El fiscal general de la CPI, Karim Khan, solicitó este lunes órdenes de arresto contra Netanyahu y su ministro de Defensa, Yoav Gallant, así como contra Yahya Sinwar, jefe de Hamás en Gaza; Mohammed Diab Ibrahim al Masri, conocido como Deif y comandante en jefe del ala militar de Hamás (Brigadas Al Qasam); e Ismail Haniyeh, jefe de la oficina política del grupo y autoexiliado en Catar.
La decisión del fiscal se anunció cuando los muertos en la Franja de Gaza superan ya los 35.500 y el Ejército israelí recrudece su ofensiva en el enclave tras más de siete meses de guerra, que estalló a raíz de un ataque terrorista perpetrado por Hamás en territorio israelí.
Sudáfrica, por su parte, instó el jueves pasado a la Corte Internacional de Justicia (CIJ) a que ordene a Israel que detenga inmediatamente su operación militar contra Rafah, la ciudad del sur de Gaza donde llegó a refugiarse más de un millón de palestinos desplazados por los ataques israelíes.
La citada sesión forma parte del caso que Sudáfrica llevó a la Corte el 29 de diciembre pasado, en el que acusa a Israel de violar la Convención contra el Genocidio en el caso de Gaza.