El vídeo, publicado en el canal de Youtube de la policía de Hokkaido, muestra la perspectiva desde el interior del vehículo mientras este recorre un camino por una zona boscosa de la localidad de Nemuro a finales del mes pasado.
El vehículo se detiene al aparecer por la derecha del camino un oso, que se abalanza sobre la camioneta y comienza a golpearla con sus garras, causando grietas en el vidrio frontal y dañando los limpiaparabrisas antes de que el conductor reanude la marcha y se aleje por el camino.
Las autoridades niponas difundieron también una fotografía que muestra el estado en que quedó el vehículo tras el ataque, con abolladuras visibles en sus carrocería y el vidrio frontal fracturado en varios puntos. Los dos ocupantes salieron ilesos del incidente.
La policía urgió a la ciudadanía a permanecer dentro de sus vehículos en caso de incidentes similares, y les recomendó también llevar espráis ahuyentadores de osos como medidas preventivas.
Los expertos achacaron el comportamiento agresivo del oso pardo, de aproximadamente 1,2 metros de longitud, a la presencia de crías en el momento de pasar el camión, lo que habría llevado al animal a atacar al camión para defender a los oseznos.
Japón viene registrando un incremento de los ataques de osos a humanos, de los que se registraron 198 casos y seis víctimas mortales durante el año fiscal comprendido entre abril de 2023 y el pasado marzo.
Se trata de las mayores cifras registradas desde que las autoridades comenzaron a compilar estos datos en 2006, un incremento que se atribuye a la escasez temporal de nueces y bellotas, principales alimentos para estos animales, lo que empuja a estos grandes mamíferos a abarcar áreas fuera de bosques o montañas.
Ante el incremento de estos sucesos, las autoridades niponas han tomado otras medidas como aumentar las subvenciones para cazadores de osos u organizar seminarios para entrenar a la ciudadanía en el uso de trampas y armas contra estos grandes mamíferos.
Los osos autóctonos del archipiélago japonés son el “Ursus thibetanus japonicus”, una subespecie del oso asiático considerada vulnerable o con alta probabilidad de quedar en peligro la extinción, y los osos pardos del Ussuri (“Ursus arctos lasiotus”), que habitan exclusivamente en la isla septentrional de Hokkaido.