Las cifras reflejan que las llegadas irregulares de inmigrantes desde el 1 de enero hasta el 2 de mayo aumentaron un 190 % respecto al mismo periodo del pasado año.
Como es habitual, la gran mayoría de estas personas accedieron a España por las Islas Canarias, ubicadas en el Atlántico, frente a la costa africana. Hasta allí llegaron 15.982 personas en 242 embarcaciones precarias, conocidas como pateras, lo que supone un incremento del 369 % respecto a 2023.
Pese a la cifra global, las llegadas al archipiélago canario se redujeron en los últimos dos meses, pues 2024 arrancó con cifras muy altas de inmigración irregular. De hecho, en enero y febrero llegaron 11.932 migrantes, en tanto que en marzo fueron 1.183, y en abril alrededor de 2.800.
Las llegadas de inmigrantes a Canarias se incrementaron de manera notable la segunda mitad del año pasado y los primeros meses de 2024, pese a lo arriesgado de la travesía, ya que la llamada Ruta Canaria de la emigración es de las más peligrosas del mundo; y esas llegadas disparan las cifras totales de inmigrantes que llegan a España de manera irregular.
Mientras, a las costas de la Península y a las Islas Baleares (Mediterráneo) las llegadas siguen en ligero descenso: 2.947 migrantes, un 4,7 % menos que en los mismos meses de 2023.
En total, por vía marítima accedieron a España 18.930 personas, 12.383 más que en el mismo periodo del año pasado, en 454 pateras.
Y por vía terrestre, aumentaron más del triple las llegadas a las ciudades españolas de Ceuta y Melilla (norte de África, fronterizas con Marruecos), con 957 personas en total, 646 más que las llegadas en los primeros cuatro meses de 2023, la mayoría de ellas a Ceuta.