La Policía Federal de Brasil continúa los trabajos para identificar con exactitud a los migrantes, posiblemente originarios de Mauritania y Mali, que perdieron su vida en las aguas del Atlántico intentando alcanzar territorio europeo.
Fuentes de la institución indicaron a EFE que "probablemente" el objetivo de la embarcación, que se cree que partió de Mauritania con al menos 25 personas a bordo, era arribar en las islas Canarias, que ha visto incrementar la llegada de cayucos (embarcaciones precarias) de migrantes en los últimos meses.
De hecho, los migrantes desaparecidos al intentar alcanzar por mar las islas españolas desde el continente africano han aumentado un 20 % en lo que va del año, según un reciente informe de la Organización Mundial de Migraciones (OIM).
Las autoridades brasileñas han trasladado los cuerpos de los fallecidos desde la región de Salgado a Belém, la capital de Pará, estado situado en la Amazonía brasileña, para determinar las causas de sus muertes, que se sospecha que haya sido por hambre y sed.
"Ese trabajo lo haremos ahora y debe extenderse hasta el fin de semana. Allí será identificada la causa de la muerte, pero probablemente fue por falta de alimento y agua", señaló el superintendente de la Policía Federal en Pará, José Roberto Peres.
La embarcación estuvo a la deriva unos 4.800 kilómetros hasta ser avistada por pescadores locales el sábado pasado.
El origen de la misma se ha sabido gracias a documentos que indicaron que el 17 de enero estaba en Mauritania y a diversas pertenencias encontradas en el interior, entre ellas 25 chubasqueros.
Este tipo de tragedia es rara en Brasil, pero no inédita.
En 2021 fue localizada en la costa del estado de Ceará (noreste) una patera con los cuerpos de tres migrantes, cuyo origen también era Mauritania, de acuerdo con la Policía Federal.