En los debates de los últimos meses se repitieron buena parte de los argumentos que había sido utilizados durante décadas por parte de defensores y enemigos de una legalización.
La aprobación por parte del Bundesrat estuvo en duda hasta el último momento debido a que varios estados federados -en los que hay Gobiernos presididos por la conservadora Unión Cristianodemócrata (CDU) y Baviera donde gobierna la Unión Socialcristiana (CSU)- habían manifestado su oposición a la norma.
Oposición conservadora
Los primeros ministros de Sajonia y Sajonia-Anhalt -ambos estados del este de Alemania-, Reiner Haseloff y Michael Kretschmer, habían estado entre los principales opositores del proyecto.
Kretschmer había advertido de que el cannabis podría ser la puerta de entrada que llevara a muchos consumidores a drogas más fuertes. Haseloff dijo que la nueva ley puede incluso llevar a que haya más muertos, tanto por el consumo en si como por accidentes de tránsito relacionados con éste.