“Los asnos de San Possidonio (norte) acabados en subasta están a salvo. Gracias al enorme revuelo y a la gran suscripción popular que permitió reunir más de 56.000 euros, la asociación Horse Angels, que inició la recaudación de fondos online, ha adquirido 57 burros”, indicó la Organización Internacional para la Protección de los Animales (OIPA) en su web.
Los burros fueron “víctimas de un procedimiento de quiebra y, como tales, subastados como simples ‘bienes móviles’. La adjudicación se realizó por 33.000 euros, en total 40.326 incluidos los gastos accesorios”, explicó la OIPA, que dio a conocer la precaria situación de los animales y generó una ola de solidaridad entre muchos italianos.
La gran recaudación lanzada por Horse Angels, en la que participaron 1.400 donantes, permitió la adquisición de los burros, de los que 49 habían sido declarados aptos para el sacrificio, tras seis horas y media de subasta este martes.
La OIPA “se congratula por este feliz final, pero insiste en que es inaceptable que seres que sienten acaben subastados entre coches, bicicletas, puestos industriales y mercancías diversas”, aseguró la organización.
Lea más: Defensa Animal realiza “decomisos” de mascotas: ¿en qué consisten y cómo denunciar casos?
“La subasta de animales es un procedimiento administrativo poco ético en el que los animales se consideran meros objetos. En este sentido, la legislación italiana está muy lejos de la transposición del Tratado de Lisboa de 2007, que protege a los animales como ‘seres sensibles’.
Burros podrán vivir protegidos
Ahora, "los burros de San Poseidonio podrán vivir protegidos y rodeados de cuidados y amor".
“También podrán ser adoptados a distancia para garantizarles una vida segura y digna” gracias a Horse Angels, que aseguró que la adquisición de los animales ha sido “solo una etapa del recorrido de este proyecto para asegurar una futura vida sostenible a los burros” y que está organizando visitas y encuentros con los animales para quienes que apoyaron su compra.