“En las cárceles federales contamos con el ‘Protocolo de Gestión para Presos de Alto Riesgo’, con el que controlamos uno por uno a los narcos santafesinos para que no actúen y para que la cárcel no sea un lugar del delito”, escribió la ministra en su cuenta de X.
La publicación está acompañada por una imagen en la que puede apreciarse a 25 reclusos divididos en tres hileras, sentados en el piso, con las piernas abiertas a corta distancia de sus compañeros de celda, con el torso descubierto, las manos atadas detrás de la espalda y la cabeza gacha.
El método similar al utilizado por el presidente de El Salvador, Nayib Bukele, fue usado tras un operativo de requisa sorpresa en la unidad penitenciaria N.º 11 Piñero, donde se encuentran presos sicarios y segundones en las líneas de liderazgo de las bandas narco, que manejan el negocio de la venta de droga en la ciudad de Rosario.
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La requisa fue llevada a cabo horas después del ataque a balazos a un bus que transportaba agentes penitenciarios para desarrollar sus tareas en esa cárcel el sábado pasado, donde tres guardias carceleros resultaron “levemente heridos”, según reportó el ministro de Justicia y Seguridad santafesino, Pablo Cococcioni.
El ‘estilo Bukele’ luego de un cobarde ataque
“Un micro que transportaba agentes penitenciarios fue cobardemente atacado en Rosario, donde tres empleados resultaron levemente heridos. Estas son las reacciones de los delincuentes a las acciones que estamos llevando adelante”, remarcó en sus redes.
El gobernador de la provincia, Maximiliano Pullaro -muy cercano a la ministra Bullrich-, inició una fuerte campaña de lucha contra el narcotráfico desde que asumió el 10 de diciembre pasado, lo que le ha valido más de una amenaza contra su vida y la de su familia.
“Vamos a seguir ajustando los controles en cárceles, restringiendo visitas, requisando, aumentando el patrullaje, investigando y reforzando la seguridad en las cárceles. Quienes están presos, están presos, y ahí se van a quedar, y si no lo entienden la van a pasar mal”, afirmó el ministro provincial.
Durante la requisa a más de 250 internos, en las celdas se encontraron y confiscaron cuchillos, teléfonos celulares y tarjetas SIM, que fueron entregados a la Justicia.
Un gesto de transparencia
Pese a estar detenidos, los narcos han transformado las cárceles en su “segundo hogar”, de manera que, desde hace años, emiten órdenes a sus grupos desde el penal.
En un comunicado de la cartera de Seguridad provincial, Cococcioni aclaró que las fotografías son “un gesto de transparencia” de procedimientos de control que “no deberían ser un tabú”.
“Es lo que nuestro personal tiene que vivir a diario y es como se está trabajando para recuperar la seguridad en los penales de Santa Fe y, por este medio, también recuperar la seguridad en las calles”, indicó.