"Entre los condenados se encuentra el director de la compañía india (Quramax Medical, Ragnevdra Pratar)", dijo un portavoz de la corte.
Los acusados fueron declarados culpables de evasión fiscal, venta de medicamentos de mala calidad o alterados, así como abuso de poder, negligencia y soborno.
Entre los condenados figuran también ex altos funcionarios uzbekos, que concedieron licencias para la importación de medicamentos indios.
El Ministerio de Sanidad de Uzbekistán informó en diciembre de 2022 sobre la muerte de varios niños que ingirieron un jarabe de tos de fabricación india, que contenía etilenglicol, una sustancia tóxica.
Inicialmente, se comunicó la muerte de 18 menores, aunque luego las autoridades subieron la cifra de los fallecidos hasta casi 70 niños.
El juicio del caso comenzó en agosto de 2023, con 23 acusados en el banquillo.