El ministro de Información yemení, Muamar al Eryani, dijo hoy que por sexto día consecutivo los hutíes continuaron cortando el suministro de agua e imponiendo un "estricto asedio" en la aldea de Al Mashaiba del distrito de Al Mashanna, en la provincia de Ibb, a unos 190 kilómetros al sureoeste de Saná.
De acuerdo con el funcionario, los insurgentes arrestaron a unos 60 aldeanos, entre ellos cinco mujeres, "en una réplica de las violaciones de la ocupación israelí" en la Franja de Gaza, donde Israel también cortó el suministro de agua e impuso un cerco.
Por su parte, fuentes de seguridad de los hutíes afirmaron a EFE que el pasado martes se desataron unos enfrentamientos entre las fuerzas policiales insurgentes y los aldeanos mientras éstas intentaban detener a dos vecinos de la localidad acusados de cometer un asesinato.
Sadam al Tawil y su hermano se resistieron al arresto y la riña terminó con la muerte de ambos acusados, así como de cuatro policías de los hutíes, entre ellos un oficial.
Tras el incidente, Al Eryani acusó a los hutíes de "hacer estallar" la casa de la familia Al Tawil en represalia por la muerte de los agentes, algo que ha desatado un clima de alta tensión en el pueblo.
Fuentes tribales afirmaron a EFE que en estos momentos hay varios mediadores locales que están en contacto con las partes para poner fin a los enfrentamientos.
Los rebeldes hutíes controlan gran parte del noroeste del Yemen desde 2014, cuando estalló la guerra con el Gobierno internacionalmente reconocido y los insurgentes tomaron la capital, Saná, desplazando así al Ejecutivo a la ciudad meridional de Adén.