La vicepresidenta Kamala Harris encabezó el contraataque ayer, horas después de que el propio Biden respondiera, enfadado, para decir que “su memoria es buena”. El problema es que en las respuestas a los periodistas tuvo otro desliz al llamar presidente de México al mandatario egipcio Abdel Fatah al Sisi.
La investigación del fiscal especial Robert Hur descartó cargos penales contra él por retención de documentos clasificados pero lo describe como un “anciano bien intencionado y con mala memoria”.
“La forma en que se caracterizó el comportamiento del presidente en ese informe no podría ser más errónea en cuanto a los hechos y (estaba) claramente motivada políticamente”, declaró Harris a periodistas.
En una intervención este viernes ante la Asociación Nacional del rifle, el propio Trump se permitió opinar sobre el estado mental de Biden. “Me pregunto si se da cuenta de que está vivo”, dijo el exmandatario de 77 años.
Hur fue designado por el expresidente republicano Donald Trump como fiscal federal para el distrito de Maryland en 2017 antes de ser nombrado por el secretario de Justicia de Biden, Merrick Garland, como fiscal especial para el caso de los documentos.
Para el senador demócrata John Fetterman está claro que Hur tenía intenciones como “designado por Trump”. “Fue sólo una difamación y un golpe bajo”, afirmó.
La avanzada edad de Biden, de 81 años, se ha convertido en un tema central de la campaña electoral para las presidenciales de noviembre muy a su pesar y ha dirigido el foco hacia Harris, que le sucedería en el puesto si renunciara o quedara incapacitado.
En las encuestas tanto Biden como Harris cuentan con índices de aprobación bajos en esta campaña por otros cuatro años en la Casa Blanca, que posiblemente disputarán en las urnas a Trump, de 77 años.
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“Inapropiados”
La Casa Blanca también protestó este viernes por boca de Ian Sams, el portavoz de la oficina del asesor legal.
No llegó a decir que Hur tomaba partido pero sugirió que se sentía bajo presión para “ir más allá de su competencia” debido a la polarización política.
“Cuando la conclusión inevitable es que los hechos y las pruebas no respaldan ninguna acusación, uno se pregunta por qué este informe dedica tiempo a hacer críticas gratuitas e inapropiadas al presidente”, afirmó Ian Sams a periodistas.
“Cuando eres el primer fiscal especial en la historia que no inculpa a nadie, hay presión para criticar”, afirmó.
Los republicanos han pedido a Biden que dimita.
Trump, que se enfrenta a cargos penales por retener documentos clasificados y luego negarse a cooperar con los investigadores, ha acusado al Departamento de Justicia de aplicar un doble rasero.
Sams también restó importancia a la idea de que las críticas a la edad de Biden podrían perjudicarle para los comicios.
“Creo que la opinión pública es inteligente”, dijo.
Hay un comentario que dolió especialmente a Biden.
“Sugerir que no podía recordar cuándo murió su hijo está realmente fuera de lugar”, añadió Sams.
“¿Cómo diablos se atreve?”, dijo el presidente el jueves, sobre la muerte de su hijo Beau, fallecido de cáncer en 2015.