Según el calendario oficial del Consejo de Diseñadores de Moda de EE.UU. (CFDA), que lleva varios años planteando la cita como un escaparate de la moda patria en toda su diversidad, la "Fashion Week" tiene lugar del 9 al 14 de febrero pero esta noche ya empieza la acción con dos desfiles notables, de Christian Siriano y Puma.
Entre los nombres más destacados están la firma minimalista Helmut Lang y su aclamado creativo Peter Do, que darán el pistoletazo de salida este viernes, y el diseñador Thom Browne, presidente del CFDA desde el año pasado, cuya firma homónima estará encargada de cerrar esta edición.
En la primera jornada, se esperan presentaciones de Collina Strada, Willy Chavarria o Tommy Hilfiger, este último un símbolo de la moda estadounidense que marca su propio ritmo, convocando sus desfiles fuera de calendario y poniendo a la venta su colección inmediatamente después.
La cita ha pasado de ser un evento centralizado, con sede en Bryant Park (1993-2009), Lincoln Center (2010-2015) y los Spring Studios del Soho -concentrado en una semana de febrero más otra de septiembre-, a tener unas localizaciones y fechas muy dispersas de acuerdo con las necesidades de cada uno.
En los últimos años habido desfiles en escenarios espectaculares e insospechados como la biblioteca pública, lo alto del Empire State, el parqué de la bolsa o el histórico salón Armory, donde sin ir más lejos este 2 de febrero Marc Jacobs se inspiró en el teatro para presentar una ropa de aire naíf y con formas exageradas.
El CFDA, no obstante, parece querer reunificar esta cita amada por los "influencers" y los famosos, y estrena una nueva sede tras meses de especulación: el Starrett-Lehigh Building, un antiguo edificio industrial en el barrio de Chelsea lleno de "lofts" donde se han convocados muchos desfiles.
En la "Fashion Week" los nombres siempre vienen y van: entre las novedades, están el debut de Ludovic de Saint Sernin, Callas o Jane Wade; los retornos de Monse, Libertine o Lafayette 148; y la ausencia de Palomo Spain o Ralph Lauren, que estuvieron presentes en la última edición.
También la firma española Delpozo vuelve a Nueva York, pero no con un desfile, como acostumbraba hasta 2017, sino con presentaciones reducidas para el sector minorista con sus nuevos directores, coincidiendo con el anunciado relanzamiento de su negocio, según indicó una portavoz.
Aparte, hay una constelación de eventos paralelos, como la plataforma de diseñadores de Latinoamérica (FDLA), donde el cantante de reguetón puertorriqueño Lennox estrenará su marca Durini, o la pasarela Arts Hearts Fashion, con desfiles llamativos como el de Anthony Rubio, con moda para perros y sus dueñas.
Y muchas marcas, sobre todo las emergentes que cuidan más los costes, siguen prefiriendo presentar sus colecciones en formato "streaming" o con catálogos digitales, una tendencia que llegó para quedarse tras la pandemia, y por la que optan firmas como Maisie Wilen o Hervé Leger.