Grundberg hizo este llamamiento en una visita a Teherán, donde se reunió con el ministro de Exteriores iraní, Hosein Amir Abdolahian, para abordar la situación en el Yemen y las formas de "reducir las tensiones a nivel regional y evitar una recaída en el círculo de la violencia", según un comunicado de la oficina de la ONU.
En este contexto, pidió "salvaguardar los avances logrados hacia un alto el fuego" en el Yemen, inmerso en una guerra desde 2014 que enfrenta a los hutíes con el Gobierno internacionalmente reconocido apoyado por Arabia Saudí.
Por ello, urgió a "la reanudación de un proceso político liderado por yemeníes bajo los auspicios de la ONU", iniciado desde que el Gobierno yemení y los rebeldes alcanzaran una tregua en abril de 2022, que se ha mantenido en gran parte pese a que venció unos meses después.
Poco antes de la escalada de la violencia en Oriente Medio, los hutíes y el Ejecutivo del Yemen se comprometieron a finales de diciembre de 2023 a adoptar medidas para un alto el fuego en todo el país, al tiempo que se desarrollaron discusiones sobre una hoja de ruta para su implementación.
Sin embargo, los ataques en el mar Rojo y los bombardeos de Estados Unidos y del Reino Unido contra los insurgentes han interrumpido este proceso.
Yemen lleva inmerso en una guerra desde 2014, cuando los hutíes se hicieron con Saná, y desplazaron al Gobierno a la ciudad meridional de Adén, en un conflicto que ha provocado que el 80 % de la población del país requiera algún tipo de ayuda humanitaria.