La CE indicó en un comunicado que pidió información también relativa a la circulación de material de abuso sexual infantil autogenerado en Instagram, sobre el sistema de recomendación de esa red social y la amplificación de contenidos potencialmente nocivos.
La Comisión afirmó que Meta, también matriz de Facebook, debe proporcionar la información solicitada antes del próximo 22 de diciembre y que, sobre la base de la evaluación de las respuestas, evaluará los próximos pasos.
De acuerdo a la DSA, la Comisión puede imponer multas en caso de recibir información incorrecta, incompleta o engañosa, y también si no obtiene respuesta a sus preguntas.
En tanto que plataforma en línea “muy grande”, Instagram está obligada a cumplir todo el conjunto de disposiciones introducidas por la DSA.
Esto incluye la evaluación y mitigación de los riesgos relacionados con la difusión de contenidos ilícitos y nocivos, y cualquier efecto negativo sobre el ejercicio de los derechos fundamentales, incluidos los derechos del niño, y sobre la protección de los menores.
Meta recibió una primera solicitud de información en el marco de la DSA por parte de la Comisión el pasado 19 de octubre, relativa a la difusión de contenidos terroristas y violentos, la incitación al odio y la supuesta difusión de desinformación, y una segunda solicitud el 10 de noviembre relacionada con la protección de los menores.
La actual petición de información aborda cuestiones no cubiertas por la solicitud anterior sobre protección de menores, precisó la CE.
Por otro lado, la CE informó hoy de que ha puesto en marcha la base de datos de condiciones de los servicios digitales, centrada en plataformas en línea como las redes sociales, las tiendas de aplicaciones o los mercados en línea.
Esta base de datos es una iniciativa de la Comisión que complementa los diversos requisitos de transparencia introducidos por la DSA, incluida la obligación de que las plataformas en línea proporcionen un resumen de sus términos y condiciones en un lenguaje sencillo y fácilmente comprensible, en las lenguas de los Estados miembros en los que operan.
Según Bruselas, esta nueva base de datos servirá de “recurso” para usuarios, reguladores y partes interesadas.
La DSA introduce un nivel nuevo de responsabilidad a través de diversos mecanismos de transparencia, entre los que figura la obligación de que todas las plataformas en línea revelen sus usuarios activos mensuales y publiquen informes de transparencia.
También la obligación de que las plataformas en línea muy grandes o los buscadores designados establezcan repositorios de anuncios, publiquen informes de auditoría, elaboren informes de evaluación de riesgos y faciliten el acceso a los investigadores.
La DSA también obliga a la Comisión a mantener una base de datos de transparencia, que incluye declaraciones de motivos en las que se detalla la información que las plataformas deben facilitar a los usuarios cuando se retiran o restringen contenidos considerados dañinos o ilegales.