Israel lanzó una campaña de bombardeos en Gaza el 7 de octubre en respuesta al ataque de Hamás ese día que mató a más de 1.400 personas, en su mayoría civiles, y que mantiene secuestrados a unos 240 rehenes, según las autoridades.
Más de 10.000 personas -según el Ministerio de Salud gazatí controlado por los islamistas de Hamás-, en su mayoría civiles y entre ellas más de 4.000 niños, murieron bajo las bombas israelíes en la Franja de Gaza, un estrecho territorio de 360 km2 donde viven hacinados más de dos millones.
Tras reiterar el derecho de Israel a defenderse pero respetando el derecho internacional, Macron llamó a “proteger a los civiles” en prioridad.
“Esto requiere una pausa humanitaria muy rápida y tenemos que trabajar para lograr un alto el fuego”, abundó el gobernante francés.
“¿Cuántos palestinos tienen que morir para que termine la guerra? , dijo ante los asistentes el primer ministro de la Autoridad Palestina, Mohammed Shtayyeh, listando las necesidades: desde curar a los heridos, hasta el suministro de agua, electricidad y medicamentos.
Francia organizó esta conferencia, la víspera del anual Foro de París sobre Paz, para reunir a los principales donantes y acelerar la ayuda —alimentos, energía o equipos médicos— en la Franja de Gaza, que registra además un éxodo de sus habitantes hacia el sur.
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Naciones Unidas estima que se necesitarán 1.200 millones de dólares de ayuda para las poblaciones de Gaza y Cisjordania de aquí a finales de año. Francia ya anunció que su ayuda alcanzará los 100 millones de euros (107 millones de dólares).
“No hay crisis humanitaria en la Franja de Gaza”, afirmó Moshe Tetro, un responsable militar israelí, quien reconoció las “numerosas dificultades” que afrontan los civiles en este territorio palestino.
¿Hacia un “alto el fuego”?
Israel no participó en la conferencia, aunque le presidente francés acordó con el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, darle cuenta del evento en una conversación telefónica al término de la reunión, según la presidencia francesa.
Más allá de algunos primeros ministros europeos y los jefes de las principales instituciones de la Unión Europea (UE), los participantes no son de alto nivel y tampoco se prevé ninguna declaración final. Pocas naciones árabes enviaron delegados y, por Brasil, acudió Celso Amorim, consejero del presidente Luiz Inácio Lula da Silva.
Trece oenegés, entre ellas Médicos sin Fronteras y Oxfam, llamaron el miércoles a los dirigentes que participan en la conferencia a “hacer todo lo que esté en su mano para obtener un cese del fuego inmediato” y un mayor acceso de la ayuda.
“Naciones Unidas nunca ha registrado tantos muertos en tan poco tiempo en un conflicto”, afirmó este jueves en la radio France Inter el jefe de la agencia de la ONU para los refugiados palestinos (UNRWA), Philippe Lazzarini.
Aunque los llamados a “pausas” humanitarias, “treguas” o “ceses del fuego” aumentaron en las últimas semanas, el primer ministro israelí, dijo que mantendrían su ofensiva si el movimiento islamista no libera a los rehenes.