Así lo indicaron en un comunicado conjunto el comisario general de la agencia de la ONU para los refugiados palestinos (UNRWA), Philippe Lazzarini, y el director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, que apuntaron que las cantidades entregadas están "lejos de ser suficientes" a las necesarias.
De acuerdo con la nota, esta es la segunda entrega de suministros vitales a este hospital desde que comenzó la guerra entre el grupo islamista Hamás e Israel, que llevó al "asedio total" de Gaza.
El último envío de suministros fue efectuado el pasado 24 de octubre, cuando la OMS realizó la operación "en medio de una gran inseguridad" y ante la acuciante falta de recursos del centro médico, cuyas condiciones "son desastrosas", según la nota.
De acuerdo con la ONU, el Al Shifa se ve obligado a tener casi dos pacientes por cama, el departamento de emergencias está desbordado y hay una enorme falta de personal médico, que está atendiendo a los heridos y enfermos en los pasillos, el suelo y el aire libre.
"Las zonas del norte de Gaza no pueden ni deben quedar aisladas ni privadas de la prestación de asistencia humanitaria. A los pacientes no se les puede negar la atención sanitaria a la que tienen derecho y necesitan con urgencia. La ayuda debería llegar a toda Gaza", indicó la ONU en la nota.
Asimismo, recordó que la inmensa mayoría de los centros médicos se están quedando sin suministros y sin combustible, recurso fundamental para el funcionamiento de los hospitales y al que Israel impide la entrada desde hace un mes por temor a que sea utilizado por Hamás.
"La UNRWA y la OMS renuevan su llamamiento urgente para la entrega de combustible a las agencias humanitarias en la Franja de Gaza. Sin combustible, los hospitales y otras instalaciones esenciales como plantas desalinizadoras y panaderías no pueden funcionar y, con toda seguridad, morirán más personas como resultado de ello", recordó la ONU.