El portavoz del Ministerio de Salud egipcio, Husam Abdelghafar informó en una nota que la orden se dio a los hospitales de Norte Sinai (el más próximo al paso fronterizo de Rafah), Suez, Ismaelia, Port Said, Damieta, Sharquea, El Cairo y Guiza, todos en la zona noroeste del país árabe.
El ministro de Salud Husam Abdelghafar, mantuvo una reunión con los responsables sanitarios de todas esas regiones para hacer seguimiento de la situación del sistema de salud de esas zonas para abordar una posible crisis y para que se incremente el estado de preparación para proporcionar "suministros, medicamentos y bolsas de sangre".
"Se ordenó que el hospital principal preequipado (centro de referencia) se ponga en estado de alerta y que esté provisto con todos los equipos y suministros, para que sirva como punto focal desde el lugar de los hechos, a través del cual se clasificarán los casos y se llevarán a los hospitales de referencia, según la naturaleza del caso, además de brindar servicios médicos de emergencia", dice la nota.
El portavoz ministerial agregó que el plan incluye enviar una serie de clínicas móviles para atender algunos casos, y aliviar la presión sobre los hospitales.
También se está estudiando "el plan de los servicios de ambulancia para hacer frente a cualquier caso por las consecuencias de lo que está sucediendo en Gaza", añade la nota.
El plan de acción egipcio para una hipotética emergencia incluye brindar servicios terapéuticos, ya sea en cirugías especializadas o en el tratamiento de lesiones complejas, fracturas, quemaduras y casos médicos críticos, y monitorear enfermedades crónicas como hipertensión arterial, diabetes, insuficiencia renal y tumores, además a los servicios preventivos, a través del seguimiento y tratamiento de enfermedades infecciosas, así como proporcionar vacunas y sueros necesarios.
El paso de Rafah es la única salida de la Franja de Gaza que no está en manos de Israel, que desde hace más de una semana bombardea el territorio donde viven 2,2 millones de personas en represalia por el ataque terrorista de Hamás.
La agresión del grupo islamista palestino dejó 1.400 muertos en Israel, la peor matanza de su historia, mientras que en Gaza, los muertos superan ya los 2.670, la cifra más alta en la historia del enclave -que ya cuenta más muertos que en la contienda de 2014 que duró 55 días- y los heridos suman 9.600.