El comandante de las Brigadas de Al Qasam, Mohamed Deif, anunció el lanzamiento de la operación “Tormenta de Al Aqsa”, “una batalla que se ha abierto con el lanzamiento de más de 5.000 cohetes hacia el corazón de Tel Aviv”, indicó el grupo islamista.
Además, milicianos del grupo se infiltraron hoy en la ciudad israelí de Sderot, donde se desató una batalla con tropas israelíes, así como en la frontera con Gaza, donde milicianos secuestraron a decenas de soldados israelíes muertos y heridos, según confirmaron las Brigadas de Al Qasam.
Según la milicia, sus miembros liberaron a prisioneros palestinos de la cárcel israelí de Ashkelón, y en vídeos difundidos por redes sociales también se les ve dentro de las calles de Gaza con un vehículo militar israelí y con el cuerpo muerto de un soldado.
El grupo islamista Yihad Islámica, también con fuerte presencia y un brazo armado dentro de Gaza, informó de que se ha sumado al ataque de Hamás: "Somos parte de esta batalla y nuestros combatientes luchan junto a sus hermanos de Hamás, hombro con hombro, hasta la victoria".
De acuerdo con medios israelíes, el ataque múltiple por parte de Gaza cogió desprevenidos a los servicios de Inteligencia israelíes.
Más allá del estado de guerra declarado por el Ejército, el ministro de Defensa, Yoav Gallant, ordenó movilizar a reservistas y anunció "una situación de seguridad especial" dentro de Israel, "en un radio de cero a 80 kilómetros desde la Franja de Gaza".
Esto permite al Ejército "brindar a los civiles instrucciones de seguridad y clausurar sitios relevantes".
Mientras las sirenas siguen sonando de forma continua en varios puntos de Israel -entre ellos Jerusalén-, la oficina del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, anunció que el Gabinete de Seguridad se encontrará hoy a las 13.00 hora local (10.00 GMT) para analizar la situación tras una primera reunión a las 9.30 (6.30 GMT).
Hasta el momento, la escalada ha dejado tres muertos, uno en Israel y dos más en Gaza, según fuentes oficiales, aunque son cifras provisionales.
En una localidad israelí cercana a Gaza, "una mujer de unos 60 años murió por un impacto directo (de cohete)", indicó el servicio de emergencias israelí Magen David Adom, que reportó además 15 heridos, dos en estado grave, seis en estado moderado y siete con heridas leves.
En Gaza, "dos palestinos murieron esta mañana y muchos otros resultaron heridos, algunos de gravedad, en un bombardeo israelí al este del campo de refugiados de Bureij", en el centro del enclave, tras un intercambio de disparos entre milicias gazatíes y fuerzas israelíes, informó la agencia oficial de noticias palestina, Wafa.
"Esperando una feroz represalia israelí, todo tipo de actividades, incluidas escuelas y universidades, así como empresas en la Franja de Gaza, se detuvieron y la gente se quedó en casa", añadió.
Con todo, Saleh al Arouri, alto cargo de Hamás, llamó también a los palestinos de Cisjordania “a librar esta lucha”, que describió como “una operación a gran escala destinada a defender la mezquita de Al Aqsa” de Jerusalén “y liberar los presos palestinos”.