Javier Milei, de la Libertad Avanza y Sergio Massa, candidato del oficialismo fueron los protagonistas del debate presidencial de la Argentina que se realizó el domingo con vistas a los comicios del 22 de octubre.
El primero de los dos debates obligatorios establecidos por la Cámara Nacional Electoral (CNE) previos a las elecciones de octubre se celebró este domingo en Santiago del Estero, la ciudad más antigua de Argentina, e incluyó como ejes temáticos la economía, la educación y los derechos humanos y la convivencia democrática.
Bajo un formato extraño, que sólo permitió 5 réplicas para toda la noche a cada candidato -Milei y Massa las agotaron en el primer bloque, mientras que la aspirante del Frente de Izquierda y de los Trabajadores, Myriam Bregman, las administró de tal forma que llegó al espacio de derechos humanos con tres disponibles-, los cinco políticos que buscan ocupar la Casa Rosada desde el 10 de diciembre mostraron sus propuestas e ideas sobre esos tres asuntos.
Precisamente Milei y Massa, los dos más votados en las elecciones primarias el pasado 13 de agosto, son los que, según la mayoría de encuestas, tienen más probabilidades de alcanzar la segunda vuelta del 19 de noviembre.
Ante ese panorama, la candidata de la coalición Juntos por el Cambio (centroderecha), Patricia Bullrich, tercera líder más votada en agosto, intentó polarizar con ambos: con el ministro, como representante del kirchnerismo que, según ella, “deja una Argentina arrasada, caótica”; y con el libertario, porque, en su opinión, “está solo” y carece de la estructura nacional que ella tiene.
Lea más: Milei promete una Argentina con “niveles de vida similares a Italia o Francia” en 15 años
“Casta” versus “gobierno de unidad”
El libertario, la gran sorpresa de las primarias de agosto pasado, mantuvo un tono mucho más moderado que el habitual en sus discursos, apariciones públicas o entrevistas, aunque repitió las ideas que le hicieron recibir el apoyo de 7,4 millones de argentinos: criticar a la “casta política” y proclamarse como “única fórmula en condiciones de terminar con la inflación y la inseguridad”.
Por su parte, el titular del Palacio de Hacienda reiteró que si alcanza la Presidencia convocará un “gobierno de unidad”, al que no dudaría en llamar “incluso a los liberales”, según afirmó a una consulta del propio Milei.
Massa fue el más interpelado por sus cuatro contrincantes, Bullrich, Milei, Bregman y el líder de Hacemos Por Nuestro País, el peronista disidente Juan Schiaretti, por las actuales cifras macroeconómicas de Argentina que, bajo el Gobierno de Alberto Fernández, registra un 124,4 % de inflación interanual y un 40,1 % de pobreza.
El ministro admitió que “los errores de este Gobierno lastimaron a la gente” y, aunque recordó que integra el gabinete desde hace algo más de un año, pidió “disculpas” por ellos y solicitó a los votantes que el 22 de octubre no acudan “con bronca ni con odio” y sí “con esperanza”.
Lea más: Massa asegura que su “victoria” en los comicios presidenciales de Argentina “está cerca
Derechos humanos
Si bien en el bloque de educación, los candidatos intercambiaron sus propuestas sobre lo público y lo privado, con una especial mirada a las protestas sindicales en el ámbito docente -Bullrich dijo que con ella “la historia de los paros y el adoctrinamiento se termina” porque va a declarar “la educación servicio esencial, para que las huelgas sean fuera de los 190 días de clase”-, los derechos humanos levantaron ampollas.
Milei negó la existencia de las decenas de miles de desaparecidos de la última dictadura (1976-1983), signada en 30.000 por los organismos de derechos humanos y “en 8753″ por las cifras oficiales, y avaló el duro discurso de su candidata a vicepresidenta, Victoria Villarruel, quien equipara los crímenes de lesa humanidad cometidos por el Estado con la violencia de los grupos terroristas.
“En los 70 hubo una guerra”, en la que las fuerzas de seguridad del estado cometieron “crímenes”, pero “también los terroristas mataron gente, torturaron, pusieron bombas y cometieron delitos de lesa humanidad”, afirmó.
Enfrente, la candidata de izquierda, reconocida activista y abogada de Jorge Julio López, sobreviviente a la dictadura y desaparecido en 2006 tras declarar en el juicio contra el expolicía Miguel Etchecolatz, mostró su “indignación” ante el negacionismo.
Lea más: Paraguay quiere recurrir al Mercosur por trabas de Argentina
“No voy a naturalizar que vuelvan las ideas negacionistas y que hablen de libertad aquellas personas que justifican los secuestros y los campos de concentración de la dictadura”, indicó Bregman.
El segundo debate tendrá lugar el domingo 8 de octubre en la Facultad de Derecho de la Universidad de Buenos Aires (UBA) y, en caso de que haya una segunda vuelta electoral -que se celebraría el 19 de noviembre-, se programará un tercer debate para el 12 de ese mes.