El euro se cambiaba hacia las 15.00 horas GMT a 1,0563 dólares, frente a los 1,0514 dólares en las últimas horas de la negociación europea del mercado de divisas de la jornada anterior.
El BCE fijó el cambio de referencia del euro en 1,0539 dólares.
La inflación armonizada subió en Alemania en septiembre un 0,2 % respecto al mes anterior y un 4,3 % interanual (6,4 % en agosto) y en España aumentó un 3,2 % interanual (2,4 % en agosto).
Para frenar la escalada de la inflación el BCE ha subido sus tipos de interés desde julio del año pasado en 450 puntos básicos, hasta el 4,5 %.
Anteriormente el euro había caído por debajo de 1,05 dólares, mínimo desde diciembre de 2022, porque la aversión al riesgo de los inversores impulsa las compras del billete verde y por las malas perspectivas económicas para la eurozona.
Los analistas de Monex Europe consideran que a esta depreciación contribuyeron "las noticias procedentes de Italia sobre la intención del gobierno de implementar una política fiscal más laxa, incompatible con la reanudación el próximo año de las reglas fiscales en la eurozona", noticias que han aumentado el diferencial de la deuda soberana italiana a 10 años y el Bund alemán hasta cerca de los 200 puntos básicos, su nivel máximo desde mediados de marzo.
"Dada la posible situación actual de recesión en la zona euro, el BCE no podrá continuar con las subidas de tipos para controlar la inflación", según Monex Europe.
De este modo podría aumentar el diferencial con los tipos de interés en EEUU, que son más elevados que en la zona del euro y podrían subir más este año, y esto debilita al euro porque las inversiones denominadas en dólares son más atractivas.
La moneda única se cambió en una banda de fluctuación entre 1,0491 y 1,0563 dólares.