El papa quiso visitar este centro que se ocupa de pobres y necesitados y entre los que hoy había varios migrantes procedentes de Albania, Armenia y Colombia que viven en este barrio y vienen a veces al comedor social.
Francisco estuvo solo unos minutos saludando a las personas presentes a quienes agradeció "su acogida". "Todos somos hermanos y esto es lo importante: la hermandad", dijo.
Antes de llegar a este barrio, el papa recibió en el arzobispado, donde se ha alojado, a representantes de varias ONG que se ocupan de la asistencia y del socorro de los migrantes en el Mediterráneo, pues el fenómeno migratorio es el principal tema de reflexión de los Encuentros Mediterráneos, que han reunido a cerca de 60 obispos y jóvenes de la cuenca mediterránea.
También saludó en el arzobispado al vicepresidente de la Comisión Europea Margaritis Schinas y hoy mantendrá asimismo una reunión con el presidente francés, Emmanuele Macron.