Al Asad se reunirá con Xi Jinping en su primer viaje a China desde el inicio de la guerra

Beirut, 19 sep (EFE).- El presidente sirio, Bachar al Asad, viajará este jueves a China para reunirse con su homólogo, Xi Jinping, en la primera visita del mandatario a ese país asiático, aliado de Damasco, desde que estallara el conflicto armado en Siria hace cerca de doce años.

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El máximo mandatario sirio visitará Pekín y la ciudad suroriental de Hangzhou acompañado de la primera dama, Asma al Asad, así como de una delegación formada por diversos líderes políticos y económicos, informó hoy la presidencia del país árabe en su cuenta oficial de Telegram.

Además del encuentro con Xi, Al Asad participará en una serie de reuniones y actos adicionales durante su estancia, agregó el órgano presidencial, sin ofrecer detalles.

Según el diario oficialista Al Watan, propiedad de familiares del presidente sirio y que cita a fuentes propias no identificadas, también está previsto que el sábado acuda como invitado oficial a la ceremonia inaugural de los XIX Juegos Asiáticos en Hangzhou.

Esa edición de los juegos, en la que participan atletas sirios, debía haberse celebrado hace un año, pero las autoridades chinas decidieron posponer su celebración en plena oleada de la variante ómicron del coronavirus.

Esta será la primera vez que Al Asad viaje a China desde el estallido de la guerra civil siria en 2011, aunque antes del conflicto sí había visitado esa nación aliada que los expertos creen está interesada en potenciar su influencia en Siria y otros países cercanos de Oriente Medio.

Estados Unidos, antagonista cuya presencia Pekín busca a menudo contrarrestar, lidera una coalición internacional de lucha contra el grupo yihadista Estado Islámico (EI) en Siria y está desplegado en varias bases militares del país árabe, contra la voluntad del Gobierno de Al Asad.

La presidencia siria aseguró que el viaje de esta semana se produce a invitación de Xi Jinping.

Desde que Siria fuera azotada por un fuerte seísmo el pasado febrero, varios países árabes se han reconciliado con Damasco después de mantenerla apartada durante más de una década debido a su brutal represión de las revueltas populares de 2011 contra Al Asad.

El giro de actitud en la región también llevó este año a la Liga Árabe a levantar la suspensión que pesaba sobre Siria desde entonces, permitiendo que Al Asad acudiese a su primera cumbre de jefes de Estado árabes desde el inicio de la guerra.

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