La reivindicación fue hecha por los integrantes de la organización no gubernamental Mães da Sé en una manifestación que reunió a un centenar de personas en las escalinatas de la Catedral de São Paulo para conmemorar el Día Internacional de las Víctimas de Desapariciones Forzadas.
"No existe una legislación específica para los casos de desaparición civil y por eso queremos que nuestros casos se encajen en la legislación sobre desaparición forzada", dijo a EFE Ivanise Esperidião da Silva, fundadora y presidenta de Mães da Sé y quien busca infructuosamente desde diciembre de 1995 a una hija que desapareció cuando tenía 13 años.
La activista relató que, por falta de una legislación, en la mayoría de los casos la Policía no se empeña en la búsqueda de los desaparecidos al considerar que son casos de personas que se van de sus casas voluntariamente.
Y según señaló Da Silva, también muchas personas desaparecen tras ser reclutadas para el trabajo esclavo, o para ser traficadas.
La manifestación de este miércoles contó con el apoyo de familiares de personas que desaparecieron durante la dictadura militar en Brasil (1964-1985).
La falta de una legislación también implica la ausencia de políticas públicas para amparar a las familias, que además de a sus familiares "también pierden la salud, la sanidad y hasta el empleo", afirmó.
En los siete primeros meses de 2023, según el Ministerio de Justicia, 42.272 fueron declaradas como desaparecidas, con un promedio de 199 por día, y 26.296 fueron localizadas.
Da Silva considera que el número de personas localizadas podría ser mayor si Brasil contase con un archivo centralizado, que contribuya a buscar a los desaparecidos en varias regiones.
En respuesta a este problema, el ministro de Justicia de Brasil, Flávio Dino, anunció hoy que el Gobierno decidió unificar los registros de denuncias de desapariciones en Brasil y establecer protocolos y manuales para tratar este tipo de casos.
Dino anunció igualmente un acuerdo con Meta que permitirá la publicación en portales de Facebook e Instagram de las fotografías de niños y adolescentes que sean declarados como desaparecidos, para que puedan ser vistas por internautas que vivan en un radio de 160 kilómetros del lugar de la desaparición.