El museo, que atesora algunas de las colecciones arqueológicas más importantes del mundo, con amplias secciones dedicadas a Grecia y el Egipto faraónico, informó el miércoles del extravío de artefactos de joyería hechos de oro, piedras semipreciosas y objetos de vidrio datados hasta el siglo XV a.C.
"The Telegraph" aseguró por su parte que algunos de esos objetos, que no estaban en exposición pública, sino en colecciones abiertas únicamente a académicos e investigadores, desaparecieron de los almacenes del museo durante un largo periodo de años, y algunos de ellos "aparecieron a la venta en eBay ya en 2016".
Tanto "The Times" como "The Telegraph" señalan como la persona acusada de esas sustracciones a Peter Higgs, doctorado en arqueología de 56 años, que comenzó a trabajar allí en 1993 y ha escrito las guías que han acompañado a algunas de las grandes exposiciones organizadas por el Museo Británico en los últimos tiempos.
Uno de sus hijos, Greg Higgs, de 21 años, declaró a ambos diarios que su padre está "devastado" y defendió su inocencia.
El arqueólogo trabajó en el museo durante más de tres decenios "sin incidentes", recalcó su hijo. "Confiaban en él para muchas cosas. Y de pronto, no sé qué cambió. Está devastado porque este es el trabajo de toda su vida, básicamente, nunca he conocido a nadie tan apasionado con lo que hacía. Es un experto mundial en su campo", agregó.
El Museo Británico ha detallado que la división de delitos económicos de la Policía de Londres está llevando una investigación sobre les hechos, en la que no se han llevado a cabo arrestos hasta ahora, y avanzó que iniciará medidas legales contra el individuo al que consideran responsable de los robos.
El museo ha negado que el valor de los objetos extraviados sea de 80 millones de libras (93 millones de euros), como había especulado le prensa, según informó "The Times", que indica que las piezas que ahora se están tratando de recuperar no estaban aseguradas.