Esta decena de muertes que recogió la Dirección General de Servicios de Salud de Bangladesh en su último boletin llevaron al país a superar los 281 fallecimientos por dengue que contabilizó en 2022, el año más mortífero desde que comenzaron los registros en el 2000.
A ello se sumaron 2.589 nuevas hospitalizaciones, que elevaron a 59.716 los casos desde enero, con los hospitales desbordados y obligados a cribar entre los pacientes que acuden a ellos en busca de ayuda.
"No podemos acomodar a todos los pacientes que vienen a nuestro hospital. Solo admitimos a los pacientes más graves", dijo a EFE el director del Mugda Medical College Hospital de Dacca, Nikaruzzaman, que explicó que cada día, "al menos 150 personas reciben tratamiento" en su centro.
"Tenemos unos 500 pacientes con dengue ahora en nuestro hospital", agregó.
Más allá de la cifra oficial de casos, que se aproxima a los 60.000 en lo que va de año, se estima que el número de contagios es mucho mayor puesto que muchas personas están fuera de la red de vigilancia del Gobierno.
De seguir con la misma tendencia, la cifra oficial de contagios podría superar los datos de 2019, el peor año con 101.354 casos de dengue.
A pesar de que los brotes de esta enfermedad viral son habituales en el país asiático, su empeoramiento este año responde a la falta de coordinación entre las agencias gubernamentales, según los expertos.
"Tenemos varias autoridades trabajando para controlar el dengue. Pero les faltó coordinación. También dudo de la eficacia del químico que usamos para el control de mosquitos", dijo a EFE el profesor de zoología en la Universidad de Jahangirnagar, Abu Faiz Mohammad Aslam.
Aunque la situación ya es grave, Aslam insistió en que todavía queda tiempo para tratar de reducir la cifra de contagios, ya que a menos que se tomen medidas efectivas "puede volverse catastrófica".
El dengue es una infección viral potencialmente mortal transmitida por mosquitos hembra, principalmente de la especie Aedes, y sus síntomas incluyen dolor de cabeza, dolores musculares y articulares, y erupciones en el cuerpo.
Los casos de dengue en Bangladesh generalmente comienzan a aumentar en julio y bajan en octubre, aunque los expertos advierten cada vez más de que factores como el cambio climático, la urbanización no planificada o la mala gestión del suministro de agua aumentarán la incidencia de la enfermedad en el futuro.