Según el GUR, el principal objetivo del “Centro de Coordinación Conjunta” establecido por Rusia para ejecutar este acuerdo alcanzado en julio del año pasado por Moscú con la ONU y Turquía era reducir tanto como fuera posible la exportación de grano ucraniano a través del corredor previsto en el propio acuerdo.
Este objetivo, afirma la inteligencia ucraniana, se cumplió mediante el bloqueo por parte de Rusia de las inspecciones previstas por el acuerdo a los barcos que se disponían a entrar en el Mar Negro para cargar cereal ucraniano.
En uno de sus pasajes, en el documento, que lleva la firma del Centro de Coordinación Conjunta, dice que “la inspección cualitativa de los barcos fue también un elemento clave para reducir el crecimiento descontrolado de las exportaciones de grano de puertos ucranianos”, según ha denunciado el GUR en su cuenta de Telegram.
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Otro fragmento del informe, que tendría como destinatario el Kremlin, afirma que las medidas para “reducir el número de barcos que se dirigían a puertos ucranianos y para limitar de forma significativa el volumen de exportaciones alimentarias desde Ucrania” llevaron a “imposibilitar a Kiev la exportación de unas 20 millones de toneladas”.
Fuentes del puerto ucraniano Pivdeni, uno de los tres desde los que Rusia se comprometía a permitir la exportación de grano en virtud del acuerdo, han denunciado a EFE repetidamente en los últimos meses el bloqueo en ocasiones total impuesto Moscú a través de las inspecciones.
“El documento demuestra que todas las acciones para sabotear el Acuerdo del Grano eran parte de un plan único desarrollado con antelación, y los bombardeos dirigidos contra la infraestructura portuaria de Ucrania son simplemente un paso más en su ejecución”, dice el GUR sobre los ataques rusos contra puertos ucranianos de los últimos días.
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Rusia lleva desde el pasado martes atacando casi a diario los puertos ucranianos de la región de Odesa, y en especial las terminales dedicadas a la exportación de grano. Los rusos han bombardeado también otras infraestructuras agrícolas en otras zonas de Ucrania.
El Kremlin anunció el lunes de la semana pasada que no tiene intención de extender más el acuerdo del grano, lo que supone en la práctica el cierre a la navegación comercial desde y hacia los ucranianos del Mar Negro.