Drugia recibió hoy, junto a su entrenador, el soldado Anderson Acosta, una medalla "simbólica" durante la ceremonia de condecoración a los militares e indígenas que participaron en la Operación Esperanza, en la búsqueda de los menores, que están recuperándose de su estancia en la selva en un hospital de la capital.
Wilson se convirtió en un héroe para Colombia, después de que se conociese que pudo hallar a los menores, pero los militares nunca encontraron al canino, que formaba parte sus filas, y ahora, casi 2 meses después del accidente, consideran improbable que aparezca.
En los dibujos que pintaron los cuatro menores en el hospital, de hecho, aparece el perro, dibujado entre la selva que los mantuvo ocultos durante 40 días, después de que el 1 de mayo se estrellase el avión donde viajaban junto a su madre, un líder indígena y el piloto, que fueron hallados muertos.
Los menores, que permanecen en el área de Pediatría del Hospital Militar Central (HMC), son la niña de 13 años Lesly Mukutuy, quien se encargó de cuidar durante 40 días de sus hermanos Soleiny Mukutuy, de 9; Tien Noriel Ronoque Mukutuy, de 5 años, y Cristin Neruman Ranoque, una bebé que cumplió su primer año de vida en la selva amazónica ubicada entre los departamentos de Caquetá y Guaviare.
Su recuperación es "positiva" y "estable" después del avanzado estado de desnutrición y deshidratación en la que se encontraban los niños indígenas.
En su búsqueda participaron casi dos centenares de militares, acompañados de unos 80 indígenas y guardias indígenas, que colaboraron de forma sin precedentes para encontrar a los niños en las selvas del sur del Guaviare, donde finalmente fueron encontrados el 9 de junio.
Este lunes, junto a Drugia, también fueron condecorados por el presidente Petro estos rescatistas y las cabezas de las instituciones y ministerios que también ayudaron en esta intensa búsqueda.
Llevaban más de un mes perdidos en la densa y virgen selva ubicada cerca del Parque Nacional del Chiribiquete después de que el 1 de mayo un avión Cessna 206 operado por la compañía Avianline Charter´s, procedente del resguardo indígena de Araracuara, de donde era la familia, se estrellara en esta zona.