“Se trata de la cruz pectoral que el papa Benedicto XVI había legado a su parroquia de origen”, anunció la policía en su comunicado, con respecto al objeto del robo, que ocurrió entre las 11.45 y las 17.00 del lunes, hora local, en la iglesia de San Osvaldo.
Los ladrones forzaron la vitrina empotrada en la pared en la que se exhibía la cruz pectoral, cuyo valor para la Iglesia católica es “incalculable”, según recalcó la policía bávara.
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Además, sustrajeron también dinero en efectivo que se encontraba en la caja de un puesto de venta de revistas situado dentro de la iglesia.
La BLKA ha abierto diligencias en cooperación con la fiscalía de Traunstein y como parte de su investigación ha pedido a posibles testigos que acudan a la policía si disponen de indicios que puedan contribuir a esclarecer los hechos.
La iglesia de San Osvaldo fue, según la página web de la parroquia, el lugar en el que Georg Ratzinger, más tarde conocido como el papa Benedicto XVI, descubrió su vocación y donde celebró en 1951 su primera misa tras ser consagrado sacerdote.