La Administración de Servicios Astronómicos, Geofísicos y Atmosféricos de Filipinas (PAGASA) informó hoy de que el foco del tifón se localizaba 815 kilómetros al este de Luzon Central, con vientos sostenidos de 175 kilómetros por hora, a las 05.00 hora local (22.00 GMT).
La misma agencia había informado horas antes de que Betty, como denominó al tifón al entrar la víspera en zona de vigilancia filipina, había sido degradado de la categoría de supertifón al haber perdido intensidad en las últimas horas.
No obstante, se espera que el norte de Luzon, la isla más poblada de Filipinas y donde se encuentra la capital, Manila, experimente lluvias continuadas, posibles deslizamientos y fuertes vientos provocados por Betty hasta el martes por la mañana, con concentraciones máximas de hasta 200 milímetros.
El archipiélago de Batanes, al norte de Luzon, se verá afectado por Betty hasta el miércoles.
Recomendaciones a la ciudadanía
Las autoridades filipinas han recomendado a las poblaciones afectadas que se preparen para posibles evacuaciones e introduzcan en sus viviendas cualquier mobiliario exterior y refuercen las puertas y ventanas, además de apagar los dispositivos electrónicos, según el medio ABS-CBN.
Asimismo, Philippine Airlines anunció el sábado que ha cancelado alrededor de una decena de vuelos domésticos en los próximos días en anticipación por los efectos de Betty.
Tras su paso por Filipinas, se prevé que Mawar/Betty continúe en dirección norte-noreste a finales de semana hacia Taiwán, China y Corea del Sur, donde el impacto podría ser mínimo. El ciclón se dirige hacia Luzon tras azotar la noche del miércoles la isla de Guam, un territorio no incorporado de Estados Unidos en Micronesia, donde ha dejado un rastro de destrucción a pesar de que no se han registrado víctimas mortales ni heridos de gravedad. EFE man-pav/ics (foto)(vídeo)