La empresa con sede en Dallas (Texas, EE.UU.) registró una facturación entre enero y marzo de 30.139 millones de dólares, lo que supone un aumento del 1,4 %, respecto a los 29.712 millones de dólares obtenidos en el mismo periodo del año anterior.
Traducido en acciones, el beneficio por título en el primer trimestre ha sido de 0,58 dólares, un 12,1 % menos interanual.
Tras dar a conocer sus cuentas, las acciones de AT&T caían un 5 % en las operaciones electrónicas previas a la apertura de la sesión en Wall Street.
La compañía destacó el "crecimiento constante" de clientes de 5G y de fibra, así como "un crecimiento rentable impulsado por el aumento de los ingresos por servicios inalámbricos y la banda ancha".
"El trabajo que estamos haciendo hoy está sentando las bases de un crecimiento duradero a largo plazo, y seguimos confiando en nuestras previsiones para todo el año", dijo el consejero delegado de la firma, John Stankey.
Sin embargo, según su plantilla de resultados, la compañía logró 424.000 nuevas adiciones de líneas de telefonía de postpago, un 38,6 % menos que en el mismo periodo del año anterior.
AT& reflejó también descensos en sus divisiones de internet para corporaciones (ingresó 5.640 millones de dólares, un 6,7 % menos interanual), y en su negocio en Latinoamérica (690 millones de dólares, un 49,8 % menos), aunque aumentó en el de consumidores (3.161 millones de dólares, un 2 % más).