"Después de una operación de once horas, 440 personas, incluidas 8 mujeres y 30 menores, se encuentran a salvo a bordo del Geo Barents y son atendidos por el equipo", informó MSF en sus redes sociales.
El barco humanitario había llegado este martes a la zona en la que se encontraba la embarcación en dificultad, pero debido a las malas condiciones climáticas no pudo intervenir inmediatamente.
El mal tiempo de estos días ha reducido las llegadas de migrantes a las costas italianas, pero se espera que retomen cuando mejoren las condiciones meteorológicas.
Las llegadas ascendieron a 28.000 en los tres primeros meses de 2023, un 300 % más que las 6.800 de 2022 y a este ritmo, las proyecciones apuntan a 430.000 desembarcos a finales de año y el Gobierno pretende acelerar las iniciativas para frenar las salidas especialmente desde Túnez y Libia.
Ante esta situación, la primera ministra italiana, Giorgia Meloni, organizó este martes una reunión con varios ministros.
Según los medios italianos, de esa cita interministerial surgió la necesidad de detener el flujo procedente de Túnez, desde donde están partiendo la mayoría de los barcos últimamente.
"En este sentido, es importante la visita del ministro de Asuntos Exteriores tunecino, Nabil Ammar, a Roma en los próximos días para reunirse con nuestro ministro de Asuntos Exteriores, Antonio Tajani", señalaron fuentes del Gobierno.