Valle arribó al aeropuerto internacional Ramón Villeda Morales, en el norte de Honduras, en calidad de deportado en un vuelo operado por el Servicio de Control de Inmigración y Aduanas, según imágenes difundidas por medios locales de prensa.
Fue condenado en enero de 2016 a 10 años de cárcel tras declararse culpable de delitos de narcotráfico, pero solo estuvo 8 años, mientras que su esposa, Marlen Amaya, cumplió una condena de 6 años.
Ambos fueron detenidos en octubre de 2014 en el sector de El Porvenir, en el departamento occidental de Copán, limítrofe con Guatemala, y extraditados en enero de 2015.
El hondureño es el menor de los hermanos Valle Valle, de los que Estados Unidos indicó en 2014 que eran importantes traficantes de drogas.
Los hermanos Luis Alfonso y Miguel Arnulfo Valle, líderes de la organización, fueron condenados en septiembre de 2017 a 23 años de prisión por el tráfico ilícito de drogas.
Su hermana Digna Azucena, detenida en Florida, fue sentenciada en julio de 2015 a 11 años y 2 meses de prisión, y 5 años adicionales de libertad condicional supervisada, por delitos relacionados al tráfico de drogas.
Sin embargo, Digna Azucena fue puesta en libertad supervisada el 28 de noviembre de 2018 luego de colaborar con la Fiscalía de Estados Unidos.
Otro de los hermanos, Reyniero Valle, cumple condena por lavado de activos en Honduras, país donde varios hijos de los líderes del cartel han sido procesados y permanecen recluidos.
Las autoridades hondureñas buscan a Daysi Maribel Valle, a quien se le han asegurado varios bienes y cuentas bancarias.
En agosto de 2015, el Departamento del Tesoro de EEUU designó a los hermanos Valle como capos del narcotráfico y aseguró que "la organización de tráfico de drogas de los Valle es una de las más prolíficas organizaciones de tráfico de narcóticos de Centroamérica".