Según explicó la agencia en un comunicado, el cambio de perspectiva de estable a negativa en la calificación Ca (inversiones altamente especulativas) para el sistema bancario argentino refleja el deterioro en las condiciones de operación debido a la inestabilidad del desempeño macroeconómico de Argentina.
Este escenario incluye una reducción significativa en el desempeño económico esperado -con una contracción probable del PIB del 0,5 % en 2023, según Moody's- y una inflación persistentemente alta, que ya supera el 100 % interanual a principios de este año.
Además, según la calificadora, las grandes tenencias de deuda emitida por Tesoro y por el Banco Central argentino por parte de los bancos los exponen a las condiciones financieras "cada vez más difíciles" del emisor soberano.
"Estos desafíos son compensados en parte por los fundamentos relativamente sólidos de los bancos, con reservas de capital considerables, tenencias de activos líquidos históricamente altas y beneficios adecuados", señaló Moody's.