"Entendemos que estamos en una región que tiene un sistema financiero muy resiliente (...) que ha estado bien supervisado en los últimos años. La verdad es que la región ha dado un ejemplo muy bueno de cómo se maneja el sistema financiero", afirmó Goldfajn en una conferencia de prensa previa a la asamblea anual del BID.
El presidente del organismo anotó que es necesario "ver en las próximas semanas" cómo evoluciona la situación tras la caída del SVB, pero mostró cierto optimismo sobre las posibles consecuencias en Latinoamérica.
"Me imagino que en la región estamos preparados para lo que viene, que no es una sorpresa", subrayó.
Goldfajn reconoció además que probablemente el tema se tratará en la asamblea anual del organismo que se celebra este fin de semana en la capital panameña.
"No le puedo decir lo que los gobernadores van a hablar pero estoy seguro que van a hablar de la coyuntura, inclusive de esto último", apuntó Goldfajn.
En la asamblea, agregó Goldajn, "tenemos una sesión donde se debaten las cuestiones macroeconómicas y tienen que ver con todo, con el crecimiento, las cuestiones sociales, pero también con la inflación, con el costo del dinero y con qué va a pasar, con los riesgos que están ahí".
En la Asamblea Anual del BID está previsto que participen líderes económicos y financieros -ministros u otras autoridades económicas- especialmente de América Latina y el Caribe, pero también del resto de países que integran el banco de desarrollo, que suman un total de 48.
La repentina caída del banco Silicon Valley Bank, uno de los mayores colapsos bancarios en la historia de Estados Unidos, ha disparado las dudas sobre la salud del sector y los temores a una nueva crisis financiera.