Ambos se vieron las caras este jueves por primera vez desde la invasión rusa de Ucrania, en un breve encuentro de ocho minutos en el que Blinken trasladó a Lavrov el apoyo de Estados Unidos a Ucrania y en el que exhortó a Rusia a que permanezca en el tratado antinuclear Nuevo START y a que libere al estadounidense Paul Whelan.
"No somos tan ingenuos como para creer que el breve encuentro entre el secretario Blinken y el ministro de Exteriores Lavrov vaya a cambiar el comportamiento de Rusia, pero era importante que la Federación rusa nos escuchara", declaró en una rueda de prensa el portavoz del Departamento de Estado, Ned Price.
El funcionario subrayó que Estados Unidos siempre transmitirá a Rusia sus intereses "de manera muy clara para que no haya malentendidos" en asuntos de gran relevancia para el mundo.
En ese sentido, recordó que desde el inicio de la invasión ha habido contactos entre diferentes niveles de ambos Gobiernos cuando ha sido necesario.
Price rehusó confirmar si fue Blinken el que pidió ver a Lavrov en los márgenes de la reunión del G20 en Nueva Delhi, algo que ha asegurado la portavoz de Exteriores de Rusia, María Zajárova.
El vocero de la diplomacia estadounidense aclaró que "no fue una reunión bilateral", sino "un encuentro bastante breve en el que el secretario aprovechó para transmitir clara y directamente los mensajes que son importantes para Estados Unidos".
Lavrov y Blinken no habían mantenido ningún encuentro personal desde el inicio de la guerra en Ucrania en febrero de 2022.
El líder de la diplomacia estadounidense había señalado el miércoles desde Uzbekistán, antes de viajar a la India, que no planeaba reunirse con su homólogo ruso y que tampoco lo haría con su par chino, Qin Gang.
Price alegó que Blinken no se vio con Qin en Nueva Delhi porque ya mantuvo una "larga conversación" hace dos semanas en Múnich con Wang Yi, director de la Oficina de la Comisión de Asuntos Exteriores del Partido Comunista de China (PCCh).
No obstante, explicó que durante las próximas semanas habrá nuevas llamadas y acercamientos entre la diplomacia estadounidense y la de Pekín.