Se espera que hacia el mediodía el ciclón arribe a la larga franja de costa entre las ciudades mozambiqueñas de Beira e Inhambane, con fuertes vientos y oleaje de hasta nueve metros, lo que amenaza a zonas pobladas por alrededor de 1,75 millones de personas, indicó la agencia de Naciones Unidas.
El ciclón Freddy es excepcional por la larga distancia que ha recorrido y su larga duración, ya que comenzó a formarse hacia el 6 de febrero en la costa noroccidental de Australia, al otro lado del océano Índico, un fenómeno que no ocurría desde el año 2000.
En Madagascar, el ciclón ha causado menos daño del esperado, en parte gracias a los sistemas de alerta y a las evacuaciones realizadas en zonas más vulnerables, destacó hoy en rueda de prensa la portavoz de OMM Clare Nullis.
En Mozambique, el ciclón tiene potencial para afectar con lluvias torrenciales de hasta 400 milímetros en el espacio de apenas 72 horas, lo que podría causar inundaciones en suelos que ya están saturados por una estación húmeda especialmente lluviosa en fechas recientes.
La OMM también advierte de que los efectos del ciclón podrían extenderse a otros países del sur de África como Zimbabue y Sudáfrica, donde algunas zonas podrían recibir en 48 horas hasta 300 milímetros de precipitaciones, lo que también aumenta el riesgo de crecidas e inundaciones.