Durante la conferencia de prensa semanal sobre la situación epidemiológica del país, el director general de Vigilancia de la Salud, Guillermo Sequera, explicó que en años anteriores el chikunguña circuló “de manera importante” en zonas del departamento Central y en Asunción, la capital del país, consideradas las más pobladas del territorio paraguayo, así como en la ciudad de Pedro Juan Caballero, fronteriza con Brasil.
"Pero nunca fue tan grande como está siendo ahora", alertó el funcionario.
Según las cifras del Ministerio de Salud, en la última semana de 2022 se contabilizaron 632 pacientes con chikunguña, estadística que se disparó a 1.484 casos del 1 y al 7 de enero de este año.
Entre el 8 y el 13 de enero pasados, se registraron 638 positivos por chikunguña.
Al referirse a la evolución de las estadísticas, Sequera advirtió que, a diferencia de la covid-19 o el dengue, las notificaciones de chikunguña no se han reducido drásticamente como tradicionalmente ocurre en enero, mes de las vacaciones de verano en el Cono Sur.
"Si en enero, mientras estamos quietos, estamos tranquilos, esto está sumando, no quiero saber lo que va a ser febrero", alertó Sequera, quien invitó a tomar medidas para evitar la proliferación de los criaderos del vector.
Los registros sanitarios indican que en las últimas tres semanas han sido descartados 2.107 casos de arbovirosis (dengue, chikunguña y zika) en el país, mientras que otros 7.678 son considerados sospechosos.
Hasta la fecha, Paraguay contabiliza una muerte por chikunguña.
Por su parte, el dengue, que es endémico en el país, suma 22 casos confirmados en las últimas tres semanas.