Una vez concluido un proyecto piloto que se desarrolló en 2022, el Departamento de Cumplimiento de la Ley de Florida (FDLE, en inglés) puso esta semana en marcha en 41 de los 67 condados del estado un sistema de seguimiento de los llamados kits de recolección de evidencia de agresión sexual (SAK).
Antes del 1 de julio deberá hacerlo en los restantes condados, según establece una ley de 2021 que entró en vigor este 2023 y lleva el nombre de Gail Gardner, una víctima de agresión sexual en Florida que luchó tres décadas para que su caso se resolviera.
"Esto es algo que pensé que nunca sucedería y ahora lo que tenemos que hacer es enseñar a la gente cuáles son sus derechos", dijo Gardner en unas declaraciones publicadas este jueves.
FDLE usó fondos de subvenciones para comprar el software STACS Track-Kit (InVita Healthcare Technologies), que ya está funcionando o está en vía de hacerlo en una docena de otros estados.
"Este sistema de seguimiento es enorme", dijo Gardner, quien fue víctima de una agresión sexual hace 35 años dentro de su casa en Orlando (Florida).
La policía perdió su kit de evidencias, pero ella insistió y logró que lo encontrarán y que hallaran a su violador en 2021.
La subdirectora de servicios forenses del FDLE, Leigh Clark, informó de que se ha capacitado a aproximadamente 700 personas, incluidas las fuerzas del orden público, personal de laboratorio y proveedores médicos, para implementar el sistema.
"Las víctimas reciben una tarjeta con un nombre de usuario y una contraseña. Pueden ir a un sitio web y ver dónde se encuentra físicamente el kit, cuándo cambia de manos del centro médico al almacenamiento o a la custodia de pruebas, y cuándo la policía lo envía al laboratorio", explicó.
Antes de la ley Gail, Florida requería que las fuerzas del orden público presentaran las SAK, dotadas de código de barras, a los laboratorios dentro de los 30 días y creó un tiempo de respuesta obligatorio de 120 días para las pruebas.
Con la herramienta tecnológica, el proceso se hace "más transparente y eficiente", según un comunicado del FDLE.
Mark Glass, responsable del FDLE, señaló que "los sobrevivientes de agresión sexual tradicionalmente han tenido que esperar demasiado para obtener información sobre el estado de sus kits".
“Este es verdaderamente un logro para Florida y dará poder a estos sobrevivientes de agresión sexual en los años venideros”, dijo.