Cargando...
Máximo Thomsen rompió el silencio y declaró en el marco del juicio por el crimen de Fernando Báez Sosa, por el que está imputado junto con otros siete rugbiers.
Thomsen, señalado como el líder del grupo que agredió a Fernando, intentó minimizar la golpiza que le propinaron a la víctima e indicó que para él solo fue una pelea.“Para mi fue una pelea. Un abrir y un cerrar de ojos”, expresó.
Las palabras del joven llegaron luego de que su mamá testificara. Esto aparentemente lo quebró, lo que motivó que pida hablar.
Otro de los detalles desprendidos de su testimonio fue que se encontraba en estado de ebriedad. “Estábamos mamados desde las siete de la tarde, solo quería comer”, dijo.
Igualmente, afirmó que respondió a unos golpes que recibió y que nunca tuvo la intención de matar. “Pegué una o dos patadas”, apuntó.
Sobre lo ocurrido luego de la pelea en la que murió Fernando, dijo no recordar con precisión. “No tengo recuerdo, estaba como en shock. Después me iban contando”, señaló.
Lea más: Fernando Báez Sosa: ¿qué dice el Código Penal argentino sobre la prisión perpetua?
Máximo Thomsen no habló sobre los otros rugbiers
En su declaración, en ningún momento hizo mención a los otros acusados por el homicidio. No dio un solo dato que complique a los demás imputados.
También se negó a responder las preguntas de la Fiscalía y el abogado de la querella.
Thomsen, es señalado como el principal responsable del asesinato de Fernando Báez Sosa. Una de las evidencias presentadas por la Fiscalía es el champión de este, que tenía rastros de sangre de Fernando y cuyo diseño quedó marcas en el rostro de la victima,
En los videos que registraron la golpiza, se lo ve pateando reiteradas veces a Fernando, quien estaba ya en el piso, inconsciente.