En su ingreso a la capital india a primera hora de la mañana, el líder opositor destacó la importancia de este movimiento pacífico, con tintes de protesta contra la política de inflación, desempleo, desigualdad y odio del país asiático.
Acompañado de su madre, la expresidenta de esta histórica formación Sonia Gandhi, y conocidos líderes políticos, Rahul Gandi tienen previsto dirigirse a los miles de seguidores que pasean a su lado con un discurso en el ocaso desde el icónico Fuerte Rojo de Nueva Delhi.
El exdelfín del histórico partido que ha gobernado la India gran parte de sus 75 años de independencia lleva 108 días recorriendo la geografía del país asiático, como parte de una marcha pacífica que clama por la "unidad" de la nación y que tiene previsto concluir en el estado norteño de Jammu y Cachemira tras 150 días y 3.500 kilómetros a pie.
La marcha comenzó el pasado el pasado 7 de septiembre en la ciudad sureña de Sriperumbudur, donde fue asesinado durante un mitin en 1991 su padre y ex primer ministro Rajiv Gandhi, y su modus operandi recuerda a las protestas del líder pacifista "mahatma" Gandhi antes de la independencia.
Hijo, nieto y bisnieto de gobernantes indios, Rahul Gandhi no tiene lazos de parentesco con el adalid de la lucha por la independencia, al contrario de lo que su apellido sugiere, pero sí puede reclamar el pedigrí del "mahatma" (gran alma), figura histórica del Partido del Congreso.
El emblemático partido, que llevó además a la India a su Independencia hace 75 años, afronta a día de hoy sus horas más bajas de popularidad, con graves fisuras internas agudizadas tras los comicios generales de 2014, cuando el partido gobernante, el hinduista BJP del primer ministro Narendra Modi, obtuvo su primera mayoría absoluta, replicada en 2019.